[LONGFIC] REMEMBER ME (CAP 19 4/5)

Capitulo 19 (4/5) 

–Tu y yo-

Ahora si estaba demasiada asustada como para pensar que responderle, pero la pregunta era ¿Qué diablos hacia aquí? Se supone que el ya se había ido con Lay, pero ahora ambos estaban ahí, sobre todo Lay que me miraba como si fuese a matar a Sehun. 

- ¡Suéltala! Ella está conmigo, yo la invite.- dijo retándolo y avanzo un paso, así quedaron con la mirada fija, Luhan soltó una risa para luego tomarlo de su camisa, me sorprendí.

- ¿¡Pero quien te crees que eres para invitarle a mi mujer a una cita!?- Luhan se había descontrolado, y lo peor era que mi observación era cierta, estaba pasado de copas. El hablaba y hablaba no media sus palabras, ni siquiera le importo que Sehun sea menor de edad y un estudiante de la escuela que el manejaba. La gente miraba sorprendida sin poder entender lo que oían.

- Ya te lo dije ella no es tuya, me ama ¿sabes? ¿Por qué no se lo preguntas?- Sehun lo empujo haciendo que soltara de su camisa, pero esto hizo que Luhan se enojara aun mas.

- ¡Te prohíbo que te vuelvas acercas a ella!- dijo mirándome. En el momento que cruzo su mirada con la mía sentí un escalofrío por todo mi cuerpo, Sehun se puso delante de mí cubriéndome.- ¿Que no te pedí que te rindieras?- lo fulmino con la mirada.

- No lo haré, a menos que ella me lo pida.- Sehun me miro- dile _________, dile que no te alejaras de mí.- el estaba defendiéndome, pero no sabía a quién debía hacerle caso a Sehun o Luhan, me sentía confundida. 

Pase por el lado de Sehun y me puse en medio de los dos.

- Por favor no peleen.-mire a Luhan- Podríamos conversar afuera, estás haciendo un escándalo. -dije a lo que tomo de mi brazo y me jalo a su costado.

- Ahora mismo nos vamos.- se veía muy enojado y eso me hizo arrepentir de mis palabras. 

- ¿Qué haces? Suéltame me lastimas. –trate de zafarme pero estaba agarrándome muy fuerte que podía sentir que iba a aplastar mi muñeca.

- Te dije que la sueltes, ella se queda aquí conmigo ¿entendiste?-dijo tomándome de otro brazo y lo miro a Luhan de manera desafiante. Sentí que en cualquier momento iba a perder cualquiera de mis dos brazos. Luhan soltó de mi brazo y avanzo donde Sehun empujándolo haciendo que el retrocediera y chocara con la barra. Intente acercarme a Sehun para ayudarlo pero solo conseguí que Luhan me alejara aun mas.

- ¡Lay!- grito Luhan. Lay camino rápidamente cerca de Sehun y se agacho a su altura tomando de su camisa. 

- No quiero golpearte niño, así que más te vale que alejes de ella.

- ¿Qué sucederá si no lo hago?- respondió Sehun. Lay rió de costado.

- si no lo haces por las buenas será por las malas, y créeme que solo lo diré una vez, te vuelvo a ver cerca de ella y te juro que amanecerás muerto.- y soltó su camisa.

- Vamos.- Luhan hablo cortante y me saco de ahí.

- Suéltame, Luhan me haces daño.- solloce.

- Te perdone con Lay, que es mi amigo, pero con él no. – Dijo empujándome dentro del audi y me senté entre lagrimas- No quiero volverte a ver con otro hombre que no sea yo ¿entendiste?- me miro fijamente pero fingí no escucharlo.

Estaba llorando en el camino hasta que llegamos a casa, abrí la puerta rápidamente y baje del auto, corrí hacia la casa, y toque, mientras esperaba a que alguien me abriera, escuche a Luhan abrir la puerta del auto.

- Hombre no seas duro con tu esposa.- dijo Lay sacando su cabeza por la ventanilla del auto.

- Sera mejor que te calles.- Luhan respondió en un tono fastidiado, le resultaba difícil caminar, ya que estaba ebrio. 

Lo mire en la forma de como se acercaba a mí y como me miraba, toque aun más fuerte, para que alguien me abriera. Una de las criadas abrió, me saludo y quise entrar pero escuche a Lay soltar una risa. Luhan había resbalado, necesitaba la ayuda de alguien, ya que su equilibrio no era bueno. Trate de acercarme para ayudarlo, pero me contuve y retrocedí.

- Adiós preciosa, cuida bien de mi amigo.- me guiño el ojo y acelero el auto, dejándome completamente a solas con él. Lo mire nuevamente como le era imposible caminar, quería acercarme para poder ayudarlo pero debería decir que por el poco tiempo que lo conozco le estaba empezando a tener a miedo, ya ni sabia como reaccionaria, siempre es de una forma distinta. Avance con miedo pero baje la mirada apenas sentí su mirada sobre la mía. Me acerque y me puse a su lado ayudándolo a caminar, fue incomodo por un momento, no dijo ni una sola palabra mientras subíamos por las escaleras. Abrí la puerta de nuestra habitación, tan pronto como hicimos nuestra entrada lo ayude a sentarse, cerré la puerta y voltee a verlo.

- Creo que sería mejor que tomaras una ducha.- lo mire tímida y resentida por lo que había sucedido hace una hora.

- no quiero si no es contigo mi amor.- sentí un escalofrió cuando dijo la última palabra.

- Tendrás jaqueca mañana si no te bañas- fingí no tomarle importancia. Luhan se levanto y avanzo un paso, me pegue de espaldas hacia una de las columnas mirándolo, entonces él se acerco aún mas y consiguió estar al frente mío. Baje mi mirada, temía por la situación de antes, alzo mi vista haciendo que nuestras miradas se cruzaran.

- ¿Por qué?- dijo calmado y fruncí el ceño.

- ¿Por que qué?- hubo un silencio profundo, el estaba tratando de controlarse. Por un momento creí que se había calmado pero me sorprendió cuando me empujo haciendo que mi espalda chocara con la pared- ¿¡Por qué diablos estabas con él!?- me dejo sin habla, no sabía que responderle.

- Puedo explicarlo hoy fue el cumpleaños- Luhan me interrumpió, salte del susto cuando el golpeo la pared en un puño, lo mire pasmada, su mirada era la de un psicópata- perdón sabría que te molestaría esto, por eso no te lo mencione – sollocé y cayeron lagrimas de mis ojos.

- Estuvieron a punto de besarse, si no fuera porque el tío de Lay nos llamo para recoger unos artículos, no te hubiera encontrado allí. 

- Iba decírtelo cuando llegara a casa, no pensaba escondértelo- dije entre lágrimas.

- Y dejar que te vieras con ese tipo. El daño ya está hecho y tienes que pagar.-lo mire frenética, estaba dispuesta a decirle en ese momento que me había enamorado de Sehun y que ya nos habíamos besado antes.

- Yo no tengo que pagar nada. Sehun es mi amigo.- dije retándolo, el me miro y tomo de mi brazo empujándome hacia la cama, caí en el suave colchón e intente levantarme lo más rápido posible, pero él ya estaba sobre mí.

- Escúchame bien ________ no quiero volverte a ver con ese niño.- el dio un suspiro, lo mire y me seque las lagrimas.

- Porque hace esto Luhan, que te hice yo para que me trates así, sabes que en verdad ninguno de los dos está enamorado, estamos obligado a estar comprometidos, no puedo casarme con alguien del cual no estoy enamorada, no puedo lo siento.- dije entre lagrimas. 

- No llores por favor, yo si quiero casarme contigo, ese era tu deseo yo me estoy encargando de hacerlo realidad…- guardo silencio y me miro como que si se arrepintiera de lo dicho, no entendía a que se refería.

- De que rayos estás hablando, jamás desee casarme contigo, ¿qué parte de que me obligaron a comprometerme con usted no entiende?- Los imparables segundos avanzaron mientras los dos nos mirábamos directamente a los ojos, intercambiando miradas. Sentí una sensación familiar, algo dentro de mí me decía que aquellas palabras que pronuncio de esos labios, eran ciertas. Nuestras miradas cruzaban. Quedamos sin decir ni una sola palabra hasta que decidí romper el silencio- déjame salir, creo que hoy no deberíamos dormir juntos.- dije y gire mi cabeza hacia el lado lateral. Jamás pensé decir esto pero sentía que no debía estar con él aquella noche, el estaba ebrio y si hay algo que es cierto, dicen que las personas cuando se embriagan dicen la verdad.

- No te vayas, quédate contigo.- lo mire un poco asustada- por favor quédate contigo y te prometo que no haré nada con él.- gire rápidamente cuando menciono “él”, entonces si tenía pensado hacer algo.

- ¿A quién te refieres con “él”? ¿A Sehun?- le reclamé- ¿Me estas chantajeando? El no tiene nada que ver aquí, así que si quieres vengarte de alguien tendrá que ser de mí y no de él.- Tenía una expresión de melancolía, pero cambio su expresión a una seria y me fulmino con la mirada.

- ¿Porque lo defiendes tanto? –Pregunto- Dime ¿hay algo entre ustedes?- Podía notar sus celos aparte del olor a alcohol.

- No lo defiendo.- iba continuar con la discusión pero prefería desistir. Si, en ese momento tenía que hacerlo ya que él estaba ebrio, y no era el momento indicado para una conversación. Ahora solo debía descansar- Déjame ir. –lo mire intentando calmarme- quiero salir.

- ¡NO! Responde ¿porque lo defiendes? –grito, y con lo mismo me masaqueo el cuerpo, el aun seguía encima de mí, la situación se torno un poco peligrosa, Luhan se había descontrolado y temía por lo que sucedería.

- ¡DEJAME IR!- empecé a usar mi fuerza para zafarme de él, pero fue en vano.

- ¡NO TE IRAS DE AQUÍ HASTA QUE ME RESPONDAS!- lo mire y empecé a golpearlo- ¿¡DIME, HAY ALGO ENTRE USTEDES!?- El tomo de mis manos con fuerza como si tratara de romperlos.

- NO DEJAME IR, NO TENGO LA CULPA DE QUE ME GUSTE ÉL.-se quedo en silencio ante lo que había dicho, así que tome la oportunidad para golpearlo cuantas veces pude. Me quede sin movimiento cuando Luhan me beso bruscamente – No dej- trataba de hablar pero solo conseguía jadear. Trate de zafarme pero me presionaba contra su cuerpo, podía sentir su beso amargo y a la vez excitante, pero era el momento menos esperado para tener pensamientos así- ¡LUHAN BASTA!- apoye mis manos sobre su pecho, empujándolo para que no pudiera acercarse a mí y gire mi cabeza hacia el lado lateral para impedir que mis labios se conectaran con los suyos, pero el tomo de mis brazos y los puso por encima de cabeza cogiéndolos con una sola mano y con la otra empezó a desabrocharme la blusa que llevaba puesta. 

Empecé a moverme de lado negándome hacia lo que ya tenía pensado hacerme, gire mi cabeza hacia ambos lados, con desesperación. 

Hubiera continuado en conseguir zafarme de él pero fuimos interrumpidos por el teléfono que estaba en la pequeña cómoda, mire rápidamente aquel equipo que no dejaba de sonar, por otra parte Luhan seguía haciendo lo suyo. Podía sentir la brusquedad y el odio en su mirada, estaba con la camisa abierta y mi pecho al descubierto notándose mi brassier de color rojo. Se detuvo cuando el teléfono dejo de sonar para que después de esto se vaya directamente a la contestadora en altavoz.

- Hola Hannie, ¿estas ahí? 

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