[LONGFIC] REMEMBER ME (CAP 28)

Capitulo 28

–Te necesito-

Me moví entre la cama y abrí lentamente los ojos. Un rayo de sol entraba por la ventana hasta tocar mi rostro. Aunque la luz del sol brillaba y parecía ser una cálida mañana sentía miedo. Lo primero que hice fue girarme y buscar a Luhan, pero solo estaba su espacio vacío.

Rápidamente me levanté y sentí mi cabeza palpitar desesperadamente. Toqué mi cabeza y jadee.

Todo lo que podía escuchar era mi nombre y hombres gritando.

- ¡Ahhhh!- gemí de dolor y me acurruque en la cama, casi llorando. Una mano se deslizo por mis brazos tratando de impedir que continuara aplastando mi cabeza con fuerza- ¡Vete! ¡No me toques!- apreté mis ojos. Solo pude sentir a alguien sentarse sobre la cama y forzarme a verlo. Me calme rápidamente al darme cuenta que era Luhan. Respire lentamente sobre su pecho.

- Todo está bien, tranquila.- hablo con una voz pasiva.

Desde que había conocido a Luhan sentí una sensación de familiaridad. Era como si en un pasado lo había conocido. Su voz, sus ojos, sus manos, todo me hacia recordar a algo, a alguien. Me quede mucho tiempo en sus brazos mientras seguía calmándome.

- ¿Ahora estas bien?- pregunto a lo que asentí con la cabeza. Realmente aun sentía miedo pero me obligue a dejarlo.

- ¿Vas a salir?- pregunte al verlo con el torso descubierto. Asintió.

- Tengo cosas que hacer.- sonrió. Lo mire sin ninguna expresión.

Baje la mirada y mire su pecho, sentí mis mejillas arder, recién me daba cuenta del estado en que se encontraba. Poco a poco se acerco a mí disminuyendo nuestra distancia hasta llegar a mis labios. Me sorprendí un poco, pero no me moví, deje que me besara. Una oleada de sentimientos e imágenes pasaron por mi cabeza. Una chica joven, de unos 14 o 15 años y Luhan se tomaban una foto. Luhan se veía más delgado, aunque su rostro era el mismo, no había cambiado. Ella me era muy familiar.

Mis ojos se cerraron y empecé a corresponder su beso. Ahora debía admitir que esto me gustaba, y lo necesitaba demasiado. Necesitaba que me tocara, y me hiciera sentir bien. Lo necesitaba a él.

Su lengua entro a mi boca, esta vez no me negué, deje que me besara como le plazca. Su boca sabia a café amargo. Nunca me había gustado el sabor del café, así que nunca intente tomarlo pero ahora que lo probaba desde los labios de Luhan sabia de una manera extraña. Irresistible. Dulce. No quería que se alejara, quería pedir más.

Tomo de mi nuca y me acerco más. Empecé a acariciar su cabello mientras seguía besándolo, cada vez más desesperadamente. Sus manos se deslizaron hasta llegar a mi cintura y ‘accidentalmente’ meterlas dentro de la camiseta blanca que no sé porque la tenía puesta. Acaricio mi espalda haciéndome estremecer por completo.

Se acerco mas, haciéndome retroceder hasta tocar la cama. Tomo de mis piernas y me jalo hasta rodearlas por su coxis. Por primera vez en mi vida no me importaba lo que estábamos a punto de hacer. Había algo que me hacia querer mas. Esta vez sus manos llegaron a mis pechos y los acaricio suavemente. Abrió mi camisa y se separo de mí para tocar mis pezones. Mordí mis labios evitando gemir. Mi respiración se hizo más pesada cuando se acerco y empezó a morder mis pezones suavemente. Me estremecí y empecé a jadear.

- L-Luhan…- Cubrí mis labios con el dorso de mi mano, impidiéndome gemir al ver que ahora introducía mi pezón en sus labios mientras que con su otra mano acariciaba mi otro pecho.

- ¿Hmm?- pregunto a la vez que me miraba y sonreía.

Agarre de su cabello y arquee mi espalda cuando sentí que se movía contra mí, friccionando nuestros cuerpos. Podía sentir su miembro crecer dentro de su pantalón.

Sus labios bajaron hasta mi vientre dejando calientes y húmedos besos. Llego a mi ropa interior y antes de que pudiera quitármela su celular empezó a sonar. Ambos nos miramos. 

- Ya regreso...- beso por última vez mis labios y salió de la habitación.

“Mierda, ¿Qué acabo de hacer?” me pregunte a mi misma confundida. Me había dejado llevar por la situación.

Arregle mi camisa y mi cabello, mientras me sentaba sobre la cama. La habitación sin él me hacía sentir extraña. Frote mis brazos intentando hacer pasar el frio que empezaba a formarse pero no sirvió de nada. Cogí mi celular y marque rápidamente el número de Minyi, pero no contesto. Suspire fastidiada y seguí buscando en mis contactos. Solo veía a Luhan, Minyi, mamá, papá, Lay, “¿Por qué mierda tengo a Lay?” negué con la cabeza y seguí bajando hasta llegar a… Sehun.

Lo pensé por varios segundos, hasta darme cuenta que había marcado.

- ¿Hola?- su voz sonaba ronca, probablemente acababa de despertarse.

- ¿Sehun? Soy ________, ¿Aun dormías? Perdón si te molesto tan temprano.

- Oh, _________.- arreglo su garganta y lo oí cambiar de posición- No, está bien. ¿Tienes problemas?

- No, nada de eso.- reí- Sólo quería hablar con alguien.- le dije sintiéndome avergonzada por haberle mentido. 

- ¿Qué? ¿Por qué? ¿Estas solas en casa? ¿Dónde está tu novio?- No sé por qué, pero me pareció cierta irritación en su voz al decir la palabra “novio”.

- Ah, ¿Luhan? Esta atendiendo una llamada.- mire en dirección de la puerta.

- Has hablado con Luhan sobre…- aclaró su garganta- ¿Nosotros?- baje la mirada y por fin recordé que Sehun y yo estábamos en algo.

- ¿Nosotros? Ah, claro.- reí torpemente. Él rió al escuchar mi voz. 

- Está bien si aun quieres pensar en ello. Puedo esperar.- sonreí- Sehun era un chico muy dulce y amable, tenía todo lo que deseaba de un chico, tal vez por eso me gustaba tanto- Entonces, ¿cómo has estado?

- Estoy bien. Un poco nerviosa últimamente.

- ¿Enserio?- su voz era muy profunda. Me hacía sentir bien.

- Enserio.- reí- ¿Y tú? ¿Has dormido bien?- me desvié del tema para evitar que me preguntara algo de lo que empezara a tener miedo.

- Si. Pero mi mañana fue especial.

- ¿Por qué?- pregunte con curiosidad.

- Porque lo primero que oí esta mañana fue tu voz.- sentí sonrojarme, no pude evitar sonreír. Estaba tan absorta en lo que me decía Sehun y en las cosas que me hacía sentir que no me percate de Luhan estaba observándome desde la puerta.

- Sehun…- susurre- lo siento tengo que irme.

- Oh. Está bien. Nos vemos en la escuela.

- Si.- colgué- ¿E-era de la oficina?- pregunte a lo que el asintió aun serio.

- ¿Era Sehun?- baje la mirada y me quede callada- Así que ya me reemplazaste por él.- bufo- Eso está muy bien. Después de todo solo soy tu juguete.- se acerco al diván y se sentó mirando hacia otra dirección que no sea yo.

Me senté en el borde de la cama mientras movía mis pies que no tocaban el suelo. Me mantuve en silencio y mire hacia abajo, resistiendo la tentación de caminar hacia él. Mordí mis labios pensando que hacer. Prefería ducharme y dejar que me pasara el malestar. Camine hacia el baño pero antes de llegar me tambalee y casi caigo al suelo, me tome rápidamente de la pared para apoyarme. Levantarme demasiado rápido me hacía sentir mareada y aturdida. Respire profundamente y me concentre en continuar caminando.

Jadee al sentir las manos de Luhan en mi cintura y jalarme hasta la cama.

- ¡Luhan quiero tomar una ducha!- me queje.

- ¿En esa condición? No.- dijo con firmeza. Suspire fastidiada y mire a un costado- Iré a buscar algo de comer, ¿de acuerdo?- se levanto pero lo detuve.

- Lo siento, pero por favor, q-quédate conmigo.- tartamudee- no quiero estar sola… empiezo a temblar cuando no tengo a nadie a mi alrededor, no sé porque.- odiaba sonar desesperada. Evite su mirada. En silencio se sentó en la cama y se acomodo a mi lado, poniendo una mano sobre mi hombro para abrazarme. Me acurruque en su pecho, sintiendo como subía y bajaba lentamente. No hablo. No dijo ni una sola palabra. Sabía que algo iba mal- ¿Estas bien?- pregunte alzando la vista. Exhalo con fuerza.

- No hagas esto.- lo mire confundida- No lo llames.

- ¿A quién?

- A Sehun.

-¿Por qué?- abrí los ojos esperando su respuesta.

- No lo hagas.

Iba a protestar por su respuesta pero tome en cuenta que no quería discutir, y no sabía que decir así que lo deje así. Volví a abrazarlo y cerré los ojos. Lo último que escuche fue su respiración.

-Pov. Luhan-

“¡Mierda! Ugh. ¿Por qué siempre de esta manera? Necesito mi auto-control en estos momentos.” Respire profundamente y me aleje de su pecho. Estaba tan excitado con tan solo verla dormir, cualquiera podría ver claramente el bulto que sobresalía de mis pantalones. Me molestaba que siempre en momentos como este mi celular interrumpiera.

Salí de la cama con cuidado de no despertar a _________ y conteste.

- Hermano, ¿Cómo estas?- pregunto Lay.

- Nada bien hombre. Mi auto-control está a punto de pasar a la historia.- hable seriamente. Él rio fuerte.

- Enserio hermano, te respeto por mantenerte tanto tiempo por una sola chica.

- Lo que sea por ella.- sonreí inconscientemente- ¿Por qué llamas a estas horas? ¿Tienes algo para mí?

- Como siempre, claro que sí. Estuve investigando a esos dos hombres que se propasaron con tu pequeña princesa.

- ¿Entonces?- le incite a que continuara.

- Alguien conocido está detrás de todo esto, no te sorprendas.

- ¿Quién?

- El hombre que mandaste al infierno.

- ¿Cómo mierda se supone que adivinare? He estado golpeando a un montón de gente, hombre. Dime.

- Es Xiumin.

- ¡Mierda!- grite pero cubrí rápidamente mis labios- ¿Sigue vivo? ¿Para quién está trabajando?

- Claro que está vivo, y no se para quien trabaja solo sé que lo vi con ella.

- ¿Ella?- fruncí el ceño- ¿De quién estas hablando?- hable confundido.

- Su mejor amiga.- se quedo callado y espere a que hablara- Minyi.

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